Hay momentos en la vida, en los que por unas circunstancias u otras, se dan una serie de coincidencias, difícilmente explicables, que te hacen cuanto menos pararte a pensar durante un cierto periodo de tiempo, o incluso indagar acerca del por qué de esa coincidencia.
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Lluvia de perseidas |
Raro es el año que no se escucha en televisión que el cometa "tal" va a ser visto desde la Tierra porque el sol, tapando la luna, creará un plano oblicuo que "patatín patatán"... y eso sólo sucede cada 66 años (por ejemplo); o qué me decis de las famosas "perséidas" se suelen salir en agosto cada cierto tiempo y que... Coincidencias.
El post que hoy os traemos al blog habla de una magífica coincidencia, de una fantástica y grata coincidencia, lástima que todo podía haber sido mucho mas maravilloso de lo que fue... la culpa ¿de quién si no? De ese maldito polvo blanco llamado heroina y que últimamente se ha vuelto a poner muy de moda en la ciudad que nunca duerme, New York.
EXCELENTE COINCIDENCIA
Sucedió hace un par de meses, durante el festival de Sidney, cuando sin saber cómo, cuándo ni por qué coincidieron en cartelera, como por arte de magia, dos películas biográficas acerca de dos de los mejores musicos de jazz de todos los tiempos: hablamos del vanguardista Miles Davis y el controvertido Chet Baker. Rodadas por diferentes directores, narran sin ningún tipo de pudor y con total crudeza el olimpo y la decandencia de estos geniales trompetitas.


DESASTROSA COINCIDENCIA
El pasado mes de agosto leía en algunos de los periodicos de tirada nacional noticias noticias como: "NYPD reacciona ante las quejas por consumo de heroína a plena luz del día", "Aumenta el tráfico de heroína en Nueva York", "Aumentan las muertes por sobredosis de heroína en Nueva York", etc.
Asco, repugnancia, pena, lástima al fin y al cabo; así se siente uno cuando lee titulares de este tipo y tiene además la posibilidad de poderlo asociar a lo que pudo haber sido y no fue. Y hoy, nos viene como anillo al dedo para enfocar la vida de estos dos grandes trompetistas; coincidencia o no, esta maldita droga, que aunque parezca mentira, se sigue consumiendo a gran escala por auténticos descerebrados, hizo descarriarse hasta lo más profundo del sinsentido la vida de Miles Davis y Chet Baker. Lo tenían todo, se quedaron en nada.
En fin, quedémosno con lo bueno, la vida sigue. Atrás dejaron un gran legado de canciones y que mejor manera que rendirle nuestro particular homenaje dejándo en el post de hoy algunas de sus mejores melodías. Gracias Miles, gracias Chet.
Summertime, de Miles Davis
Autumn, de Chet Baker
FICHA TÉCNICA DE LA ENTRADA: No procede.
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