domingo, 21 de febrero de 2016

COCAINE, pero no de Eric Clapton

Siguiendo un poco la línea del excelso refranero español, hoy vamos a tomar uno de estos refranes como punto de anclaje para contaros la historia de la canción de esta semana:Unos cardan la lana, y otros se llevan la fama”
Esta frase nos pone de manifiesto que en la vida, mientras que unos son los que se esfuerzan y hacen el “trabajo sucio”, son otros los que recogen los frutos y la gloria provenientes del sacrificio de los primeros. Y aunque nos viene bien para la entrada, hay que aclarar que en este caso el refrán no se aplica al 100%, ya que se da la situación de que el que realizó el esfuerzo inicial, lo vio recompensado en cierta medida gracias a ese rentable invento que son los derechos de autor.
No obstante, estamos convencidos de que la mayoría de los lectores creerán que la canción Cocaine es un exitazo del grandioso Eric Clapton. Y sí, el éxito comercial efectivamente se lo llevó, pero esta canción no ha sido, es, ni será suya, sino del desaparecido J.J. Cale.


Oriundo de Oklahoma City, un puntito perdido en el centro de la inmensa geografía de Estados Unidos, nace John Weldon Cale, un chico cuyo enamoramiento temprano de la guitarra eléctrica marcaría el devenir a lo largo de su existencia.
Siendo apenas un adolescente se traslada a la por entonces meca del sonido norteamericano, Nashville, donde permanece durante 8 años empapándose del conocimiento que le brindaba este inigualable ambiente musical. Pero tras llegada de la década de 1960, el joven de 22 años que salió de Oklahoma llegó a la conclusión de que su etapa en Nashville tocaba a su fin, ya que la industria que allí había proliferado había encorsetado completamente la música que se grababa, así que no había sitio para un tío raro que no se asentaba en ningún estilo.
Era vox pópuli, que en Los Ángeles se estaba cociendo una nueva oleada de producción musical que aglutinaba a todo tipo de tendencias pero de una manera más liberal y menos impositiva. Y allí llegó John Cale, con ganas de seguir aprendiendo y mejorar.
En esta etapa sigue ejerciendo como músico semiprofesional ya que su carrera no acaba de arrancar. De hecho, como alternativa a la composición se mete en el mundo de los estudios de grabación como ingeniero de sonido, trabajo que le reporta ingresos de manera estable y que le permite no distanciarse de la música.
Aunque sus singles editados nos muestran sus cualidades como músico y compositor, los números no le cuadraban y, después de muchos años fuera de casa, el cuerpo le pedía volver a sus raíces. Vuelve a Oklahoma, y tras reencontrarse con viejos amigos empieza a encontrar su estilo propio dentro de un género que hoy en día se conoce como Tulsa sound (Tulsa es una importante ciudad de Oklahoma). Aunque pretende vivir de la música, el estrellato y los contratos millonarios con sellos discográficos manipuladores no era lo suyo, porque no quería perder su libertad creativa. Y es en esta tesitura donde compone una de sus mejores obras: Cocaine.


ERIC CLAPTON

Aunque para el gran público J.J. Cale era un absoluto desconocido, para los del gremio musical era todo lo contrario, era una importante referencia por su calidad y autenticidad. Y eso lo sabía Eric Clapton.
Nada más oír Cocaine a Clapton se le encendió una chispa en el corazón: esa canción era un temazo. Él tenía que poder incorporarla a su repertorio porque aparte de su calidad sonora, el señor Clapton había tenido una tormentosa relación de amor odio con las drogas durante muchos años y quería rendirle un homneaje. De hecho se consideraba un ex adicto y su cuerpo le pedía poder cantarle una canción a la cocaína, ese polvo blanco que lo volvió loco durante mucho tiempo. Pero aunque la letra despiste no debemos confundirnos, no se trata de una oda al consumo de cocaína, sino una fina y velada crítica al mundo que te absorbe cuando caes en las redes de los narcóticos. Aun así, ante el éxito cosechado por la canción, Clapton ha tenido que aclarar esto en numerosas ocasiones.
De esta manera, y gracias a los derechos de autor, el amigo J.J. Cale consiguió continuar con su discreta carrera musical alejado de los focos, pero con una cuantiosa fuente de ingresos que le permitió abrir su propio estudio de grabación. Ya se sabe, unos cardan la lana y otros se llevan la fama, aunque en este caso, feliz Clapton, feliz Cale.


FICHA TÉCNICA DE LA ENTRADA:

- Autor: J.J. Cale.
- Título: Cocaine.
- Album: Troubadour.
- Sitio web oficial: Click aquí.
- Año de publicación: 1976.
- Versiones: Black Robot, Nazareth
- Partitura: Click aquí.


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