domingo, 15 de septiembre de 2013

BILLIE JEAN, de Michael Jackson

Hace ya muchos años, tuve la suerte de escuchar un refrán que reflexiona sobre la verdad y la mentira. La cita en cuestión es "Miente, que algo queda". Su significado es muy claro, pues todos sabemos que es muy fácil inventarse una mentira para hacer daño y, por mucho que intentes desmentirla, siempre quedará alguien que te conoce al que no le convenció tu explicación y sigue creyendo en esa falsedad.

La cuestión es que si eres una persona anónima, el daño que te puede causar algo así apenas sale de tu entorno cercano. Pero si eres alguien famoso, la cosa se complica de manera exponencial. Veámos un ejemplo:

Todo el mundo sabe que Walt Disney tras fallecer, fué congelado a petición propia, para que si en un futuro surgía un avance tecnológico que le permitiera volver a la vida, su cuerpo se encontrara en perfecta conservación.

Pues esto, queridos amig@s, es totalmente falso. Se ha demostrado que el fundador de Disney fué incinerado tras su fallecimiento. La cuestión es que siempre existirán personas en todo el mundo, que crean la historia de la congelación.

Algo parecido le ocurrió a Michael Jackson, pero en esta ocasión, el artista consiguió sacarle un beneficio increíble a una mentira que alguien inventó sobre él.

BILLIE JEAN

Michael Jackson
La historia comienza al principio de los años 80. Michael Jackson, rozando la treintena de años ha dejado de ser el pequeño talentoso de los Jackson Five, para ser el "Rey del Pop". Su música se escucha en todo el planeta. Pero antes de esto, Michael ha sufrido una infancia durísima a manos de su padre violento, una niñez alocada ya que con los Jackson Five, viajó sin cesar a infinitos lugares en toda la geografía norteamericana.

La cuestión, es que fobias y rarezas aparte, Jackson era un profesional
en lo referente al trato con sus fans. A partir de aquí, me gustaría hacer una aclaración, ya que una cosa es ser fan de alguien y otra cosa es ser un/una groupie. Los primeros son personas que sienten una gran pasión por alguna persona famosa, los segundos son personas cuyo único objetivo es acostarse con todos los famosos que puedan.
Existe una tercera categoría, la peor claramente, que consta de esas personas que llevan el fenómeno fan más allá, y que sin haber llegado a ser groupie, se inventan romances y paternidades con personalidades famosas.

He aquí, que el bueno de Michael comienza a recibir diariamente correspondencia de una chiquilla a la que no conoce de nada. La señorita en cuestión informa al cantante de que es el padre de unos mellizos que ella ha dado a luz recientemente. Al principio, nadie se toma en serio esta historia, debido a que el propio Jackson ni tan siquiera conoce a esta chica. Pero con el paso de los días, las cartas, que no paran de llegar, vienen con fotografías de los bebés. La madre comienza a reprochar a Michael el hecho de que no se quiera reunir con sus propios hijos, ya que formarían una familia feliz. Incluso llega a decirle que los niños tienen sus mismos ojos. En ese momento, el Rey del Pop, comienza a agobiarse por el tema, aunque todo su entorno le anima a que deje correr el asunto.

La cosa acaba torciéndose aún más, cuando la chica, completamente perturbada, manda a Jackson una carta y un paquete. En la carta, ella le explica que como su romance que ambos tienen es insostenible en la distancia, ambos deben acordar un día en el que suicidarse, para de ésa manera, poder entrar juntos en el cielo. Y para facilitarle el trabajo, le envía una pistola con la cual debe llevar a cabo dicha tarea.

Ante esta situación, el cantante decide denunciar a las autoridades el acoso al que está siendo sometido. Así pues, la policía detiene a la chica y, tras verificar que su salud mental se encuentra gravemente deteriorada, deciden ingresarla en un hospital psiquiátrico.

Una vez pasada esta horrible historia, Michael decidió plasmarla en una canción, ya que se sentía con la necesidad de contar lo sucedido. Para evitar usar el nombre de la acosadora, se inventó el de Billie Jean. Finalmente, el tema fué incluido en del disco de 1982 "Thriller", que no es ni más ni menos, que el disco más vendido de la historia de la música, con más de 65 millones de copias vendidas. En el siguiente vídeo podréis disfrutar de esta genial composición (en lugar de poner el video clip, he preferido poner esta actuación en directo, por ser la primera vez que Jackson baila su famoso "Moonwalk").

 


FICHA TÉCNICA DE LA ENTRADA

Título: Billie Jean.
Artista: Michael Jackson.
Album: Thriller. 
Año de publicación: 1982.
Web oficial: ww.michaeljackson.com 
Letra: Click aquí
Versiones: Chris Cornell, Coldplay 
Guitarra: Click aquí. 
Partitura: Click aquí o aquí.




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