Se acerca
abril, y con él llega a las pantallas de medio mundo la cuarta
temporada de Juego de Tronos. ¿Y de qué va esa serie?, ¿de
dragones?, ¿de hechizos?, ¿de batallas?, ¿de sexo?, ¿de intriga?,
¿de violencia?...Pues la respuesta es SÍ a todo lo anterior. Aunque
esta producción televisiva trata sobre los libros de la saga
literaria “Canción de Hielo y Fuego” escrita por G.R.R MARTIN,
popularmente se conoce como “Juego de Tronos”, que es el nombre
del primer volumen.
Esta
serie tiene mil argumentos para que te quedes completamente
enganchado a ella y esperes cada capítulo con ansia viva. Mola y
mucho, es tan buena que incluso la musiquilla del comienzo de cada
capítulo llama tu atención, tanto que la pones de melodía de tu
móvil. Después de la música, vas a disfrutar de unos 50 minutos de
placer medieval del universo de Martin.
Este planeta
en el que tenemos 3 continentes (Poniente, Essos y Sothoryos) sale de
la privilegiada cabeza de este gran autor, pero siempre te asalta la
duda de cómo una sola persona es capaz de crear tal cantidad de
territorios, fortalezas, leyendas, casas nobles y tribus.
Como se
suele decir, la realidad supera la ficción. Esta frase es perfecta
para definir los numerosos paralelismos entre este universo creado
por Martin y la historia medieval europea,ya que con numerosas licencias, ésta sirve para que el escritor vaya moldeando su increíble y fascinante mundo.
COMENCEMOS
La saga
Hielo y Fuego se ambienta en un periodo medieval en el que a raíz de
una serie de acontecimientos se engendra una guerra de sucesión
entre principalmente dos familias: los Lannister contra los
Stark. Los 7 reinos se verán implicados en este conflicto
tomando partida por un bando u otro (incluso por ambos según
conveniencia).
Pues bien,
en el año 1455, en Inglaterra (país cuya forma tiene una gran
similitud con Poniente) comenzó una guerra civil por el trono entre
dos casas, la de los Lancaster y la de los York. Esta guerra es
conocida como “La
guerra de las rosas”, ya que ambas
casas tenían una en su estandarte, blanca para la familia York y
roja para la familia Lancaster.
Este
conflicto, tuvo como consecuencia el debilitamiento de la nobleza, un
gran descontento social y el aumento de poder de los comerciantes y
el surgimiento de una “nueva” monarquía centralizada del
Renacimiento, o según Martin, El final del largo invierno.
En la saga,
Aegon I Targaryen es conocido como “El conquistador”, ya que
gracias a su poder de dominar a los dragones se desplaza desde la
lejana Valyiria junto a sus hermanas (y sus respectivos dragones)
para conquistar todo Poniente a hierro y fuego. Por ello, los 7
reinos dominantes pasan a ser 7 territorios súbditos de los
Targaryen, los cuales forman una saga que durante siglos se perpetúa
en el poder.
Guillermo II (Aegon I Targaryen) |
En nuestra historia,
existió otro “Conquistador”, pero este no comandaba un ejército
de dragones, sino de hombres. Se trata de Guillermo
II de Normandía, quien desde la costa francesa comenzó una
invasión al reino inglés con su tremendo ejército. Tras dar muerte
al rey Harold II, el último rey sajón, el vencedor francés pasa a
ser Guillermo I de Inglaterra, naciendo así la dinastía Normanda.
El rey
Robert, conocido por sus detractores como “El Usurpador”, llega
al trono de los 7 reinos tras vencer en la guerra que éste y Eddard
Stark comienzan contra los Targaryen. Así pues, llegado Robert al
poder, comienza su declive personal y político ya que, como buen
Baratheon, es un fiero guerrero que sólo disfruta en la vida
combatiendo, bebiendo y fornicando. Todo lo relacionado con asuntos
políticos, sociales y financieros correspondientes al gobierno de un
reino no le interesan en absoluto, por ello todo lo que ha ganado en
el campo de batalla, lo está perdiendo a través de unos
colaboradores corruptos y maliciosos.
Solamente su
hombre de confianza, Jon Arryn, mantiene algo de cordura en este
trono que se desmorona, entre otras cosas, porque a pesar de que
Robert posee numerosos hijos bastardos (es un contumaz fornicador),
finalmente no consigue dejar un heredero legítimo, lo cual da
comienzo a una encarnizada batalla de sucesión.
Felipe IV (R. Baratheon) |
Volviendo a
la vida real, existen numerosos reyes europeos expertos en el
fornicio y el abuso del alcohol, pero hubo un rey de español, que
con más de 100 hijos ilegítimos se parece mucho a Robert Baratheon,
y no es otro que Felipe
IV de España.
Al igual en
la ficción, Felipe IV se dedicó a cazar, divertirse y fornicar todo
lo que pudo, y para ello delegó el gobierno de la nación el
Conde-duque de Olivares. Pero cuando su heredero, Baltasar Carlos
murió, éste se vio obligado a casarse con su prima para engendrar
un heredero. Como todos sabéis, las relaciones incestuosas acaparan
un papel protagonista en la saga.
EL MURO
Esta enorme
formación de hielo de unos 500 km de largo y 200 m de alto, que
sirve para que los 7 reinos queden protegidos de los constantes
ataques de los salvajes (y algo menos humano) del norte.
Fue
construido por Bran Stark “El constructor” y es custodiado por
“La guardia de la noche”, un cuerpo militar que antiguamente
estaba compuesto por miembros de las familias más poderosas de
poniente que abandonaban todo (riquezas, títulos, mujeres etc.) por
la noble causa de proteger a los más desamparados y evitar que los
infieles salvajes cometieran atrocidades en los 7 reinos. Aunque en
la saga, esta noble tarea recae casi exclusivamente en forajidos y
delincuentes que permutan la pena de muerte por el servicio en el
muro.
Muro de Adriano |
Esta vez
tenemos una doble referencia. Por un lado, en la provincia romana de
Britania (actual Inglaterra), ante los constantes ataques de los
salvajes escoceses, las autoridades del Imperio Romano tomaron la
determinación de levantar un muro de defensa, lo que hoy en día se
conoce como el “Muro
de Adriano”, el cual tenía 117 km de longitud y entre 3,6 y
3,8 m de altura. Y por otro lado, existieron diversas Órdenes
Militares que defendían una noble causa, como por ejemplo los
Templarios, que participaron en las cruzadas contra el Islam.
LOS HOMBRES DEL HIERRO
En el reino
de las Islas del Hierro, moran los “Hombres del Hierro”, que
pertenecen a una sociedad que ha evolucionado aparte del resto de los
7 reinos, ya que tienen sus propias normas y su propia religión.
Se trata de
una sociedad con enorme arraigo en el mar, con vocación aventurera y
muy beligerante. Según sus creencias, ellos son seres superiores al
resto de los mortales, y como tal, tienen el derecho de coger todo lo
que le plazca, ya que su “Dios Ahogado” lo ha dispuesto para
ellos. Si necesitan alimentos, se montan en sus barcos y roban todo
lo que quieren, si necesitan mujeres las buscan en otros reinos y las
toman en propiedad, y si necesitan sangre se echan a la mar y sacian
su apetito pasando a cuchillo al que ellos deseen.
No hace
falta saber mucho de historia para darse cuenta de que existió otro
pueblo con grandes similitudes a los habitantes de las Islas del
Hierro, que saqueaban y expoliaban lo que querían en sus locas
expediciones marítimas: el pueblo vikingo.
LOS DOTHRAKI
El
impresionante cabecilla de los Dothraki, Khal Drogo, lidera un enorme grupo
nómada que se desplaza a lo largo de innumerables praderas con sus
caballos. Van de aquí a allá y pobre de aquel que se cruce con
ellos, porque al igual que los hombres del hierro, los dothraki son
tremendamente agresivos y les encanta esclavizar y adueñarse de todo
lo que pillan. Son igualmente temidos los encuentros entre los
distintos khalasares (cada líder o khal, manda en un khalasar
formado por todos sus guerreros y súbditos), ya que constantemente
luchan por el poder.
Guerrero Mongol a caballo |
En este
caso, la referencia histórica también es clara, ya que el pueblo
mongol presentaba todas estas características que tienen los
dothraki (nómadas, beligerantes y amantes de los caballos). Resaltar
que el Imperio
Mongol fue el segundo imperio más grande de la historia ya que
este pueblo, liderado por Gengis
Kan dominó toda Asia desde Corea hasta el mismo Río Danubio, lo
que abarcaba el 25% de la población mundial en ese momento.
Después de
repasar todos estos paralelismos (aunque todavía hay alguno más),
os dejo con la canción que da origen a la entrada de esta semana, la
cual, para nuestra humilde opinión, es una pieza fantástica que
viene a demostrar la calidad empleada en la realización de la serie
televisiva que a primeros de abril estrenará la 4ª temporada.
Os dejo ahora con la versión extendida de la Intro de la serie. Además, si lo desean, pueden ver y oir en un ejercicio de puro virtuosismo, al músico Jason Yang interpretando el sólo la partitura para cuerda haciendo click aquí.
FICHA TÉNCICA DE LA ENTRADA: No procede.
Es cierto; hay muchas similitudes. Si en ellas se ha inspirado el autor de la novela, revela unos excelentes conocimientos históricos y, lo que es más difícil, encajarlos en una novela.
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