Cuenta
la historia, que el joven Majnun era un joven locamente enamorado de
una compañera de la escuela, Layla. La amaba demasiado, ya que a
todas horas lo predicaba y a todo el mundo se lo contaba. Esa
desbordada pasión hizo que el padre de Layla considerara que el
muchacho había perdido la cordura, con lo cual rechazó la oferta
matrimonial que le ofreció el padre de Majnun, pues la alocada
actitud de su hijo estaba ensuciando el nombre de su hija.
Desesperado
como estaba el joven, su familia temió por su salud mental hasta el
punto que decidieron hacer un viaje espiritual a la Meca, para pedir
en este santo lugar que su hijo retomara el sano juicio. Estando allí
Majnun se agarró al paño que cubre la Caaba y gritó:
Esta
intensa historia de amor es el argumento que uno de los protagonistas
de la entrada de hoy utilizó para expresar una situación
sentimental parecida.
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| George Harrison y Pattie Boyd |
En 1964, durante el rodaje
de la película “¡Qué noche la de aquel día!”, el Beatle
George Harrison conoció a una joven modelo que trabajaba como extra.
Aquella rubia despampanante tenía pareja, pero ante la insistencia
de Harrison, decidió dar el paso e irse a vivir con él.
Menos de dos años
después, George Harrison y Pattie Boyd sellaban su noviazgo con un
feliz matrimonio. Todo parecía como en un sueño para George: éxito,
dinero y una belleza como acompañante. Pero como suele ocurrir, no
todo es tan idílico. El Beatle, cansado de la vida mundana y
consumista, decidió entrar de lleno en la religión y la
espiritualidad hindú. Se volcó de tal manera en este nuevo mundo,
que dejó atrás sus viejos hábitos, sus amistades y a su propia
mujer.
Por aquellos entonces, el
músico emergente Eric Clapton, el cual profesaba una gran admiración
personal y profesional hacia George aparece en esta historia. Eran
íntimos amigos, vivían uno cerca del otro y hacían colaboraciones
musicales. Después de innumerables veladas con el matrimonio
Harrison, Eric cayó locamente enamorado de la esposa de su amigo. La
amaba en todos los sentidos, pues le parecía la mujer perfecta en
cuanto a forma de ser y a belleza.
Notando Clapton que su
enamoramiento no aminoraba, pensó que acostándose con la hermana de
Pattie quizás lograría olvidarla, pero eso no sirvió para nada. A
esto hemos de sumar que el deterioro del matrimonio había ido en
aumento, a causa del abandono de George a su esposa. Así pues,
Clapton decidió declarar su amor a Pattie. Aunque inicialmente pudo
parecer que ella también le correspondía, insitía que ese amor era
imposible, pues ella estaba casada y lo de George con la
espiritualidad era un tema solucionable.
Roto de desamor y tras
confesarle a su amigo que estaba enamorado de su mujer, Eric se
distanció todo lo que pudo de la pareja, algo que consiguió gracias
al abuso de la heroína y otras sustancias ilegales. En ésa época
es donde Clapton tiene su mayor periodo de creatividad, hasta el
punto que todas las canciones de su siguiente álbum versaban de una
manera u otra sobre su obsesión con Pattie.
CLAPTON Y PATTIE BOYD
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| Eric Clapton junto a Pattie Boyd |
Finalmente, ya por 1974
cuando el matrimonio Harrison-Boyd tocaba a su fin, Eric llevó a
cabo una última intentona, pues ni ninguna mujer ni ninguna droga
había conseguido hacer olvidar a su Layla. Fuera de la escena el
Beatle, los dos amantes frustrados se reencontraron y esta vez
pudieron mostrar abiertamente su amor. En 1979 se dieron el “Sí
quiero” ante la presencia de tan sólo tres invitados: Paul
McCartney, Ringo Starr y …George Harrison!!!, que lleno de
pensamiento positivo había perdonado y olvidado todo.
Aunque
podíamos haber pensado que “fueron felices y comieron perdices”,
otra vez más, la vida nos lleva a la cruda realidad, pues no basta
con un amor exacerbado, sino que hay que sobrevivir al día a día:
la infertilidad de ella y los problemas con alcohol, drogas y mujeres
de Eric hicieron que el sueño se esfumara y tras 10 años de fallido
matrimonio, la pareja se divorciara. Años después, Clapton
declararía tras su fracaso matrimonial que "daba la impresión de que yo mismo estaba intentando sabotear mi relación con Pattie, como si una vez conquistada, ya no quisiera tenerla"
Lo que siempre nos
quedará, es la magnífica canción que Clapton dedicó a su
inalcanzable amada Layla.
Os dejo también una magnífica versión
del propio Clapton, pero esta vez acompañado de otro astro del
firmamento musical, Mark Knopfler.
FICHA TÉCNICA DE
LA ENTRADA- Autor: Eric Clapton.
- Año: 1970.
- Album: Layla and Other Assorted Love Songs
- Sitio web oficial: www.ericclapton.com
- Partitura: Click aquí
- Letra: Click aquí
- Versiones: Orquesta Sinfónica de Londres
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